martes, 21 de junio de 2011

Reflexiones sobre la confianza

Este texto es un refrito de una nota que escribí en facebook hace tiempo, pero lo he actualizado y adaptado a este presente. Solo lo quiero rescatar en este blog.



La confianza es un compromiso no vinculante. Depende de una sola de las partes, sobre la cual recae mantener esta confianza, pero no recae sobre los otros involucrados.

Voy a tratar de explicarme mediante un ejemplo: Suelen ir a reparar su carro en el taller automotriz de confianza. La confianza de esa relación recae en el taller, que por medio de su servicio, atención e intuida honestidad, hacen que uno regrese al taller cuando lo necesite. Pero la confianza no recae en ud. como cliente. En cualquier momento puede decidir ensayar otro mecánico y retornar al taller de confianza, el cual no la ha perdido, o simplemente no regresar.

Creo que lo mismo sucede en las relaciones afectivas humanas. Un amigo confía en ti, y de ti depende que ese amigo siga confiando. Esa persona puede hacerte una embarrada, tu ya no confías en el, pero igual si uno es o muy racional o muy pendejo, esa otra persona podrá continuar confiando en ti.

Un amigo solía decirme que la confianza es como un vaso de cristal. Si se rompe, lo puedes volver a pegar, pero no va a quedar igual.


Es ahí donde entra el buscar amigos con un sistema de valores y principios similar al de uno. No los chochocientos amigos de FB que realmente son un montón de conocidos, sino amigos en los que uno deposite su confianza... bueno donde uno espera que la persona vele a su vez por mantenerse confiable. Mas importante aún, parejas donde logres el complejo milagro de la confianza recíproca.

Ya es una decisión diaria si sigues tratando con las personas que creías confiables. Es tu decisión si vuelves al taller en el que te cobraron de más, aunque con ese resquemor persistente de que vuelvan a darte por la cabeza nuevamente.





Y como son reflexiones, voy a saltar a la parte social. Cuando hablas de confianza para crear sociedad, creo que es comprometerte a ser esa persona confiable por voluntad propia y porque crees que es importante que los demás puedan depositar su confianza en ti. Lo aburrido es mantenerte confiable mientras el resto de personas pasan por encima dándoselas de vivos y acomodando todo a su antojo, y seguir resistiendo estoicamente porque estás convencido que sin confianza no hay forma de lograr una convivencia real ni forma de salir de este atolladero.

Muy pendejo para muchos, pero me doy cuenta que hace tiempo tomé esa decisión. Procuraré seguir siendo una persona confiable en lo posible, pero quizá empiece a aburrirme de dar segundas y terceras oportunidades y busque nuevos horizontes en donde pueda yo también depositar con mayor tranquilidad mi confianza en otras personas.

Se responsable de ti mismo y de tus acciones. No hagas a los demás lo que no te gustaría te hicieran a ti. Frases de cajón, frases célebres, pero que si se procurara aplicarla a diario nos simplificaría la existencia a todos... y si vamos al tema político, se confiable y denuncia a los que decidieron no serlo.


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